La navidad es una época de fiestas y reuniones familiares,
normalmente en torno a una mesa con muchísima comida, demasiada en la mayoría
de ocasiones. Es normal que durante esta época comamos más de lo habitual, y de
una sentada además. Son los tan temidos atracones, que sientan de maravilla en
ese momento, pero que luego nos pueden pesar muchísimo en el estómago.
Este tipo de comilonas pueden provocar pesadez de estómago y
otros problemas más graves, como cólicos, si no tomamos precauciones. La
primera, la más evidente, no pasarnos con la comida. Si aun así hemos comido más
de lo habitual y lo notamos a través de la acidez o incluso las náuseas,
podemos optar por ayunar durante unas horas, mientras bebemos té verde o
cualquier otro producto diurético que hará que nuestro cuerpo vuelva a
equilibrarse.
La dieta blanda puede ser también una buena alternativa,
para paliar los excesos del día anterior. Comer algo de arroz blanco, pescado
con verduras… Y por supuesto, mantenernos alejados de los dulces y el alcohol,
que solo empeoraría la situación. Con estos consejos, seguro que la pesadez de
estómago se va en unas horas.
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